viernes, 3 de agosto de 2007

Aforismos

Sensación de que todo lo que uno pueda decir de positivo sonara a slogan o lugar común, pero que a la vez ser positivo es un compromiso moral y un hacer político a los que por nada debemos renunciar.Sensación de que el escepticismo es lucido pero obnubilante, y que la luz de la critica acaba por incendiar todo lo que ilumina. Sensación de que en tiempos de sombra la palabra de los cuerpos se aloja en la contorsión, en la mueca, en el rictus o en la cicatriz, pero rara vez donde mas quisiéramos: en la cadencia despreocupada del andar, o en ese desliz de cintura que urge desprivatizar

Sensación de que a la larga el nihilismo va perdiendo su exotismo, de que en medio de la confusión aparecen los pragmáticos, anotan prolijamente sus conclusiones, invitan con aparente ecuanimidad a darlo todo por el mal menor y a eliminar, en nombre de este mal menor, cualquier bien que lo amenace. Sensación de que cada vez que alguien invoca ese mal menor, con esa invocación se sacrifica lo interesante en aras de lo correcto, se identifica lo correcto con lo que hay. Sensación de que la vida se esta poniendo sospechosamente aburrida y, lo que es peor aun, el aburrimiento es bien visto.

Sensación de que es falso el divorcio entre forma y contenido y entre doctrinas y procedimientos; que las formas provocan contenidos, que los procedimientos encarnan y producen doctrinas, que la sustancia esta en los matices y la verdad se juega en los detalles. Sensación de que lo mas radical yace en la manera en que me miras, la premura con que te desplazas, la convicción de tu abrazo, el silencio que fabricas para tu amor o desamor, el rigor con que ordenas y desordenas el tiempo. Sensación de que tanto insistir es la sensación, tanto rebotar en lo epidérmico, puede parecer trivial, culinario, pretensioso o exactamente al revés, preciso, inusual, franco penetrante, pleno

Sensación de que tu, padeces todas estas sensaciones, y que también, como yo, te ves atrapada en este tejido de inacabables madres.
Por que también eres agua, y de estas palabras retienes una humedad inconsistente pero real, terca pero clara, cruda pero amable.

4 comentarios:

Tamara Jofré Zencovich dijo...

Tu texto me deja una sensación de "mira que parecido pensamos"
tan agradable como un café mega cargado con tres de azucar.

Valentina dijo...

:O, jajaj, le andai comentando a toda la gente de temuco.

de verdad eres de valpo?, me enamoré de esa ciudad.

saludos

Necrópolis dijo...

¿Aún te impresiona el atardecer?... tal vez el mar pierde su gracia a los ojos de una recurrente rutina, pero aún asombra el sol creador de maravillosos colores, reflejo del fin del mundo donde nos esperan monstruos y dragones, para el intrepido navegante que se atreve a comandar su nave cerca de la gran caida... perderá el nehilismo su exotismo gracias al pragmatismo obnubilante, contorsionado en el rictus epidermico, otorgado por la tortuosa doctrina de la que somos tan inconcientemente convencidos...

Catalina dijo...

vaya vaya señor poeta, bonita lírica, exhuberante reflexión ;)